La Madre singular de los cartujos: María, modelo de la vida cartujana

 

Los cartujos hemos profesado siempre una gran devoción a la Santísima Virgen. Uno de nuestros Superiores Generales más famosos (Dom Le Masson) escribió: “Podemos decir que la vida de la Santísima Madre de Dios es el modelo sobre el cual San Bruno plasmó las reglas de la nuestra”.

Vemos en María, modelo incomparable de dedicación al ‘Único necesario’, el ideal vivo de nuestra vocación contemplativa, y en su piedad maternal encontramos una ayuda poderosa para la realización de nuestro programa de vida “escondida con Cristo en Dios”.

Además, María, es, por su maternidad virginal, modelo de esa fecundidad espiritual que los cartujos estamos llamados a realizar en favor de las almas, por nuestra vida oculta de unión con Dios.